27 feb 2013

L.-Personajes.- 16/54 HERODES EL GRANDE





                   


                                                    


(18)          HERODES EL GRANDE 

                                                     ( 73 a.c. )
                        Herodes el Grande no era Judío propiamente dicho, ya que su padre era Idumeo, o sea descendiente de Esaú, el de las lentejas  y no era descendiente directo de Jacob ( Israel), el hermanito gemelo que le ofreció el celebre plato y recurrió al manto de oveja para engañar al viejo padre. Por otro lado la mamá de Herodes tampoco era hebrea: era una flexuosa árabe que  trasmitió a su hijo unas lindas facciones, pero no la sangre judía. Pero siempre se busca la manera de evadir prohibiciones y se descubrió que cuando los Idumeos fueron dominados por los judíos, estos últimos, muy democráticamente, les habían impuesto su  propia religión.  Así que los Idumeos se habían nacionalizados y transformados por lo menos legalmente en hijos de Israel, aun que no sabemos si con o sin prepucio. La cual cosa dejaba  completamente  indiferente a Cayo Julio Cesar, ocupado a crear  para si una fama que opacara la de Alejandro de Macedonia y  nombró Herodes, judío o no judío, como gobernador de Judea. Herodes se había ganado  la confianza de los romanos y obtuvo  el apoyo  de ellos para derrocar a la enemiga estirpe judía de los Asmoneos. En el año 40 a.C. consiguió de Marco Antonio, triunviro de Roma y poseedor de la parte oriental del Imperio romano, nada menos que el  título de rey de Judea.
                         Quien era en realidad ese Herodes el Grande? Fue un poco de todo. Judío y antijudio, partidario y benefactor de la civilización  griega y romana. Rescató los Jugos Olímpicos de la decadencia y el mismo era un deportista  entusiasta. Al mismo tiempo también se portó como un  cruel bárbaro oriental: hizo ejecutar a toda la  familia  rival derrocada, incluyendo al abuelo  y al hermano de  su esposa Marianne. También a ella la mandó ejecutar en el 29 a.C., y un año después se deshizo de la madre de Marianne: único ejemplo de la historia de alguien que tuvo el valor de matar a la suegra.  Pero Herodes tenia diez esposas y todavía  le quedaban  nueve: mas que suficientes para alegrarle o amargarle la vida en el futuro. Asimismo eliminó a dos de sus propios hijos (Aristóbulo y Alejandro), atendiendo a rumores de conspiración contra su persona; rumores levantados por otro hijo, Antípater, quien también fue ejecutado mas tarde por el sospechoso  papá porque otro rumor  decía que intentaba  envenenarle.
                        De este Antípater, digámoslo por inciso, algunos  dijeron o fantasearon que era el primer esposo de un tal Maria de Nazareth: si, exactamente, la Maria de Nazareth que en segundas nupcias  se habría casado con el carpintero José, pero cuyo primer hijo lo tendría  con Antípater, hijo de Herode; y  por lo tanto Jesús sería retoño  de estirpe real. Consecuentemente nada menos que  eventual heredero del Reino: del Reino  terrenal, por supuesto,  porque lo del Reino Celeste es algo que sobrevino después.
                        Pero a parte los pequeños detalles en su vida familiar, Herodes el Grande fue también un político muy brillante,  estadista sabio, lucido, generoso y al mismo tiempo supersticioso al borde de la locura.  Los Evangelios Cristianos hablan de él  solamente como un asesino cruel.  La famosa Matanza de los Inocentes, pocos años antes de su muerte , es atribuida a él; sin embargo es sospechoso que ningún historiador de la época haya  reportado en evento de ese tipo. Los Romanos eran muy meticulosos en mantener al día sus archivos.   Así que  parece más probable que sea un relato ficticio, posterior, con fines propagandísticos filo cristiano -- junto con el de la adoración de los magos-- aprovechando la imagen de sanguinario que sin duda tenía Herodes entre el pueblo judío y en buena parte la tenia merecida. Esa “leyenda” de la matanza de los inocentes puede encontrarse en otras mitologías, como la hindú acerca del nacimiento de  Krishna en Mathura, cuando su malvado tío materno, el rey Kamsa, hizo degollar a todos los niños del pueblo porque  una  profecía le había avisado que su sobrino le mataría y ocuparía el País  y sería Rey.
                         El Senado Romano  declaró Herodes  socius et amicus populi romani. Y en su favor hay que reconocer  que  este rey también llevó prosperidad a Palestina como nunca antes ni nunca después. Quería llevar un pueblo conservador y obstinado  del Oriente Próximo al Ilustrado Mundo “Moderno” y en eso fue generalmente apoyado por los judíos de la Diáspora, o sea los judíos que habían estado  o estaban en el extranjero y tenían una mentalidad menos pueblerina.  Herodes dio generosamente fondos para Sinagogas, para Bibliotecas y baños. Donó dinero a Atenas, a Pérgamo, a Esparta. Reconstruyó Samaria y cosa importantísima que revelaba en él mentalidad de estadista, propuso internacionalizar la ciudad de David, Jerusalén, para que fuera la capital no solamente de Judea, sino de toda la raza de Israel.   Quiso reconstruir el Templo, lo cual le llevó la belleza de 46 años,  pero terminó la bellísima reconstrucción, amarga ironía, poco antes del 71 d.d.C. cuando fue arrasado por tercera vez, pero ahora por los Romanos.
                     Como era el Templo de Herodes el Grande?
                   Era sencillamente magnifico, mas suntuoso e imponente que el de Salomón, con paredes de mármol blanco y destellos de oro que se veían desde grande distancia. Terminada la construcción,  quiso poner en el frontón del Templo una águila Dorada.  Los judíos de la Diáspora quedaron encantados, pero los judíos “piadosos” no aceptaron absolutamente ese símbolo pagano: instigaron a unos estudiantes a destruir  el Águila y entonces Herodes el Grande ligeramente molesto  los mandó a quemar vivos: no a los  instigadores, sino a los pobres estudiantes. 
                        Así era Herodes el Grande, con sus meritos y sus defectos. Y  que naturalmente no hay que confundir con otro Herodes, el herodes Antipas, su hijo, el de la danza del vientre de su hijastra  Salomé y del trágico minueto “de Herodes a Pilatos”.

25 feb 2013

L- Personajesl- 15/54 DARIO.FILIPIDES.LEONIDAS,TEMISTOCLES,PUSANIAS Y LA NINFA MILETO.JES .,


 DARÍO Iº, FILÍPIDES, LEONIDAS, TEMISTOCLES,  PAUSANIAS Y LA NINFA MILETO.
                         ( 500 a.c.)

                                     Darío I, ¿quien era este señor?   El también de la misma familia de Ciro II, se había casado con la hija de él,  Atosa.  Y con Atosa tendrá a un hijo, el también famoso Jerjes I.  También Darío  recibió el titulo de Grande y fue titulo merecido.  Claro que como en muchos casos en la historia,  lo Grande para unos es Enemigo para otros: así que para los griegos, los griegos del Siglo de Oro, los  Griegos formadores de nuestra cultura y civilización, Darío era el enemigo, el malo, el Bárbaro, como Conan. 
 Todo comenzó cuando en el 499 a.C. una colonia griega, Mileto, patria de la bellísima Ninfa Mileto, en la hodierna Turquía, se rebeló contra los persas y con la ayuda de la ciudad de Atenas, destrozó la cercana satrapía persa de Sardes.  Imaginarse Darío, yerno de Ciro II, otro Grande, el rey de Reyes, amo de medio mundo y todo lo demás: ¡ una afrenta a él !  ¡ al Amo y señor del Imperio mas grande del mundo, una afrenta de parte de unos miserables comerciantes y vendedores ambulantes de una colonia griega! Juró vengarse y como no era fuerte de memoria, para no olvidarse encargó a un esclavo que le recordara, tres veces al día, que debía vengarse de los Atenienses. Una especie de CARTAGO DELENDA EST, ante litteram. Y así fue que  en el 499, mandó a un ejército de 50.000 hombres para castigar a Atenas. Pero los griegos eran los griegos, en aquel entonces, arios  descendientes de los Rubios Aqueos, y no solamente hablaban de filosofía y de arte;   a pesar del orgullo gay  eran hombres de armas tomar. Dirigidos por el famoso Milcíades, en 490 a.C. vencieron a los persas en la famosísima batalla de Maratón,  cerca de Atenas, con todo  lo que siguió: la extenuante mortal carrera de 40 kilómetros de Filípides para avisar a Atenas de la victoria. Y eso fue el primer Maratón de la historia. El gran ejército persa se retiró a Asia, derrotado.
 Se retiró el ejército de Darío, pero no había menguado el deseo de revancha por parte de los persas. Y Jerjes, hijo de Darío, desenfundó otra ves el hacha de guerra en 484, con un ejercito inmenso para la época: la belleza de 3.000.000 de hombres, según Heródoto ; quizás  600.000 según deducciones modernas , y 600 navíos. Y con este ejercito, Jerjes,  al mando de las tropas, cruzó el Estrecho de los Dardanelos por primera vez   con un doble puente de barcos que mandó a construir,  gran hazaña de ingeniería para la época.
 Y al llegar este ejercito inmenso al desfiladero de las Termópilas en 480 a.C. otro evento mítico se verificó:  el sacrificio heroico del rey de Esparta, Leonidas y sus trescientos espartanos  que con los otros 700 hombres de Tespi y Tebas pusieron una resistencia desesperada hasta el sacrificio supremo de todos, completamente todos,  para dar tiempo a la flota griega de replegar ordenadamente conservando sus barcos y soldados.  Cuando Jerjes  llegó a Atenas y la encendió, surgió otra figura mítica, el gran Temistocles quien pudo presentar batalla a la marina asiática, siempre en  480. a.C., trayéndola astutamente a un paso angosto en Salamina , cerca de Atenas, donde la destrozó antes los ojos atónitos del gran Rey Jerjes.  Y al poco tiempo en la batalla terrestre en Platea 479. a.C. el ejercito griego, mandado por el Espartano Pausania, después de matado el general en jefe Persa, destruyó gran parte del  ejercito ya desbandado. El  lugarteniente Persa, con el rabo entre las piernas, llevó de regreso a Asia lo que quedó del otrora orgulloso ejercito de Jerjes, de Ciro y de Darío. Como anécdota fuera de lugar, recordaremos que en el siglo XIX, a la primera representación teatral de la obra LOS PERSIANOS, llegó el momento en que Pausania se dirige a los habitantes de Salamina:   Oh, Salamini !!.. “ gritó el tenor con su bellísima y fuerte voz; pero el publico era de italianos,,,, y al oír: Oh Salamini, todos se rieron y el autor se fue enfurecido del teatro de La Scala!
Pero, aparte esto,  es bello recordar que en esa zona del Este Europeo  fue la primera vez en la historia que Europa pudo defenderse de la invasiones de los “bárbaros” quienes en ese tiempo eran las huestes asiáticas de persianos y sus aliados de todo medio oriente. En esta misma zona, mas de diez siglos después, la  misma civilización  occidental, el Imperio Romano de Oriente,  se salvó de las invasiones de otros enemigos asiáticos y africanos, de religión musulmanas, que fueron vencidos en la batalla de Acroinós, por el emperador León el Isáurico, con o sin el fuego griego y con o sin la intervención de la Virgen Maria. Y casi contemporánea fue la defensa cristiano europea  en contra los mismos enemigos de la época, en Poitiers,  con la consiguiente epopeya poética de los Caballeros de Carlos Martillo y Carlo Magno.
Pero es también cierto que ésta era y es  la visión Europea, griega y Romana  de los eventos  relativos a Ciro II, Darío y Jerjes. Porque la verdad es también que  esos reyes, máxime Ciro II y Darío I, vistos desde el ángulo visual de los pueblos asiáticos que formaban el Imperio Persa, no eran absolutamente los  bárbaros como los consideraban los griegos, sino fueron magníficos administradores, muy buenos gobernantes y  organizadores del Imperio.
Desde el punto de vista de la religión, había absoluta libertad para los  pueblos sometidos, no había ni racismos ni persecuciones religiosas y, gran novedad para la época, Ciro II y Darío I, empezaron  por primera vez en la historia a pagar a los obreros que trabajaban en construcciones para ellos: así que los operarios eran remunerados! No sabemos si se habían formado también sindicatos aun que la celeridad de las construcciones hace suponer que no existían todavía.
Darío era también hombre de visiones y inició la construcción de la bellísima ciudad de Persépoli.   También proyectó la construcción de un canal en Suez que uniera el río Nilo con el Mar Rojo, para evitar la circunnavegación de África: El Canal de Suez estuvo ya programado y estudiado  dos mil quinientos años antes de que lo hiciéramos nosotros, los Europeos civilizados,  por Darío I,  el “ Bárbaro Asiático “. 

Y la bella ninfa Mileto? Quizás  responsable de esas guerras siguió escondiéndose y mostrándose, coqueta, entre los bosquecillos de Mileto.
Bueno, vino el  meteoro  de Alejandro de Macedonia, no el Grande, sino el Grandísimo, quizás el más grande conquistador de todos los tiempos. Vino, conquistó, satisfizo su ego, amó el arte, las batallas, los hombres, las mujeres, esparció la cultura y civilización griega, se murió, le sucedieron sus amigos amantes descendientes en  el importantísimo periodo del helenismo, quienes trataron de imponer otros dioses: quizás   los circuncisos, hombres al fin, hubieran podido aceptar  a la rubia Afroditas, que sus gracias las tenia;   pero al llegar al Padre Zeus, con todos esos  rayos y saetas, la cosa fue menos digerible. Así  que  fue el turno de los hermanitos  Macabeo para  levantar a la población contra los filo griegos-seleucidas. La fiesta judía de Janucá conmemora este hecho y se  prenden las velas de la Janucá,  un candelabro de 9 brazos; una vela  la primera noche, dos la segunda y así sucesivamente, hasta prender las ocho velas la última noche, además de la luz superior, denominada “shamash”, que es la que sirve para encender todas las demás. Y a la luz de la Menorah de nueve brazos el Estado Judío adquiere plena autonomía.  Primero gobernarán  los Fariseos y  después  los Saduceos. Pero luchas dinásticas y tensiones internas terminarán provocando la intervención de Roma, ama y señora del mundo antiguo. El año 63 a.C. las Águilas Romanas llegaron a Palestina,  Pompeyo conquistará Jerusalén y con el tiempo todo se fundará en la Provincia Romana de Siria. Y con los Romanos, llegó Herodes. Otro Herodes, el Grande; él también el Grande.




23 feb 2013

LL Personajes.14/54 BERENICE la de la CABELLERAellera


                                      B E R E N I C E         
          LA DE LA CELEBERRIMA CABELLERA
                            ( 300 a.c.)
                         
Comenzamos diciendo que las BERENICE  que interesan a nosotros son dos. Y escribiremos sobre ambas, para que ninguna de las dos se considere negreada.
La primera, la más antigua, es de 300 años circa antes de nuestra Era. Quieres verla?  O por lo menos una parte de ella, por la cual pasò a la historia, a la leyenda? Ella  ha formado, nada menos que  una Constelaciòn. 
No es la Via Láctea; aclarémoslo de inmediato. Lo de la Vía Láctea es otro cuento, de una cierta mamá que tuvo que huir  asustada mientras estaba amamantando a su bebecito; pero llegó Demócrito, el Gran Demócrito, el tipo ese de los átomos  ( el mismo que se quitó la vida en un famoso suicidio porque no soportaba la idea de poder ver, siendo viejo, a las bellas muchachas... pero, verlas solamente, y no otra cosa. Y  prefirió la ceguera), quien intuyó que se trataba de un amasijo de estrellas, contradiciendo al profesor Aristóteles que  conocía muchas cosas pero también contó muchos cuentitos de hada.
Bien.
La Constelación de Berenice es otra cosa. Y para verla, la constelación esa, hay que ir a la playa, una linda playita sin nadie, mejor si es una islita del Caribe, mejor todavia si en compañia de una linda mujer, de noche, sin luces que estorben; solamene el cielo  intenso con millones de lucecitas, encima de nosotros. Me refiero al cielo estrellado. Y así, acostados boca arriba, hay que mirar  hacia la Osa Mayor. En la Cola del Carro se puede apreciar un montoncitos de estrellitas en forma de “ V “.   Esa “ V “ es una constelaciòn que nuestros  romanticos antepasados los Romanos llamaron Berenice. ¿Quien era Berenice, pues? Berenice era la hija de un rey, y forzosamene tenía que ser bella.  Entre los varios atributos de su belleza = y eran muchos = ella tenía una magnífica cabellera negra, de la cual  estaba orgullosisima; siempre tenía el cabello suelto que vagamente cubría otros dos atributos interesantisimos, para que todos vieran lo bella que era y que a lo mejor tuvieran de esos pensamientos  que tanto  encantan a las chicas.  
Pero Berenice,además de bella y coqueta, eran también muy inteligente, características que dificilmente se asocian.  Era tambien hija de su tiempo, ademas del Rey de Cirene. Y vamos a ver qué es lo que hizo esta Lady Godiva de la Antigüedad.    Por razones políticas su mamà quería que se casara con un cierto Demetrio, un Macedone. Lo llamaban Demetrio El Bello. Pero a Berenice le importaba un bledo su belleza, decía que su belleza, la de ella, era suficiente para dos personas  y quería casarse con su enamorado, un cierto Tolomeo.
 Todos los Egipcios se llamaban Tolomeo.
Qué hizo entonces esa bella coqueta e inteligente mujer, con los pezoncitos  burlones jugando con su cabello? Sin pensarlo dos veces, mandó a matar al pobre Demetrio y se casó con su Tolomeo.
El cual Tolomeo, por esas manias  de los machitos de jugar a los soldaditos, decidió partir para la guerra para vengar la muerte de una hermana suya; hay quien dice que para apropriarse sencillamente de sus bienes; hay quien dice que para  tomarse unas merecidas vacaciones de su bella y demasiado exuberante Berenice. Pero Berenice era una mujer realmene enamorada. Adoraba y amaba fogosamente a su marido, aun viéndolo un poquitin desgastado, ultimamente. Asi que se fue donde el cura. Pero el cura de aquellos tiempos no era como los curas de hoy en dia que solamente  saben decir misa. Aquellos curas sabian predecir el futuro, leian las estrellas, sabian un sin fin de cosas y, sobretodo, tenian una enorme cantidad de gente que los escuchaba.  Y frente al cura, o sea, para ser  exactos, frente a la corte  completa y repleta de los astronomos oficiales, Brenice hizo la promesa que si su marido, su adorado Tolomeo, regresaba  de la guerra sano y salvo a sus brazos, ella ofreceria  su bella cabellera a los dioses.
Y asi sucedió. Tolomeo regresó.  Berenice agarró un par de tijeras y frente a los ojos asombradisimo de su marido se cortó inexorablemente su bellisima  cabellera y la ofreció  a su dios en el altar del sacrificio.
No sabemos las reacciones que haya tenido Tolomeo al ver su ex bellisima mujer  toda despelucada.  No hay  fuentes historicas atendibles. Pero lo que sabemos y en forma muy cierta,  es que la cabellera fue asumida en cielo, una Asunciòn, en fin, y formó  aquella constelacion que si se esta acostado, de noche, en una playa, en el Caribe, barriga arriba, asi como hemos sugerido nosotros, podràs verla reluciente,  cerca de la Osa Mayor.