31 dic 2011

triada de navidad 3/3 el pesebre

triada DE NAVIDAD: 3/3   El Pesebre


¿Qué es el pesebre? ¿Quién lo inventó?

El pesebre es el sitio, la caja de madera donde se les pone la comida a las vacas, a los caballos, a los  cochinos, a los animales domésticos  en general. Pero desde hace muchísimos años, casi ocho siglos, por Pesebre se entiende el sitio donde según la tradición Cristiana ha nacido, en un  establo de Belén, el Niño Jesús.
Una gran cantidad de fieles cristianos, en su mayoría católicos, durante las Fiestas Navideñas  acostumbra  “armar un pesebre”, o sea una representación del nacimiento milagroso, con contornos de pastores, ovejitas, estrellas en el cielo, los Reyes Magos y naturalmente la Sagrada Familia. Es una tradición linda, tierna,  como casi todas las antiguas tradiciones de carácter religioso que recuerdan los tiempos de nuestra niñez y primera adolescencia, una fiesta de buenos propósitos, una fiesta con mamá y papá.
 Y que no vengan ahora los  inteligentes  de siempre a decirnos que son todas patrañas y fantasías.  Claro que son todas fantasías…

… pero ¿no es la fantasía lo que nos diferencia de los otros animales? ¿Qué es la poesía y la música? Los famosos vuelos pindáricos y las fantasías musicales, ¿que eran  y son sino fantasía? ¿No es fantasía el jurar amor eterno a la mujer que  en buena fe suponemos amar por toda la vida? ¿Qué es el arte? Cuando en un retrato hacemos bellísima una mujer que no lo es tanto ¿no es fantasía? ¿No es  fantasía lo que mueve al hombre  para la búsqueda de no se sabe que, más allá de sus límites? ¿Mas allá de las columnas de Hércules? ¿Más allá de nuestro  espacio finito, a la búsqueda  más allá de nuestro mundo, de nuestro universo y un día, quizás, más allá de nuestra galaxia?   Y no es fantasía querer clonarnos, totalmente o parcialmente? ¿Qué  es la religión y las tradiciones religiosas en todo el mundo? Desde las primerísimas emociones y maravillas y temores frente a la naturaleza primigenia e inhóspita, ¿no era la fantasía la que  nos   imponía buscar  una RELIGIO,   palabra latina que indica etimológicamente una  ligazón con la divinidad que esperábamos nos protegiera?
Así que los inteligentes de siempre y que creen descubrir realidades a la Monsieur de la Palisse, que se callen. Y nos dejen vivir en paz, aun que  vivamos de fantasía.


Baja el telón….sube el telón.

Año 1182, en Italia. Después de un largo  viaje de comercio a Provenza , regresa a su casa don Bernardone dei Moriconi. Estaba cargado de mercancías pero llegó justo a tiempo para asistir a su esposa, la bella Madame Pica Bolurlemont, francesa, que estaba dando a la luz su primer hijo. Don Bernardone, feliz, levanta en sus  brazos a su primogénito y dando un beso tierno a su esposa, le dice: Lo llamaremos Giovanni, como mi padre.
 Y así fue bautizado, según las costumbres. Y  se llamó Giovanni Bernardone dei Moriconi. 


Baja el telón…sube el telón.

 
Giovanni es un joven guapísimo, inteligente, su papá lo manda a que se eduque en la mejor manera de la época;  estudia latín y las otras ciencias previstas para las clases altas. En grupos de amigos coetáneos, se dedica a gozar la vida,  la juventud y las  riquezas de su padre. Escribe poesías, toca el laúd. Su mamá, Madame Bourlemont , lo mira con cariño y orgullo: Mi esposo, su padre - se dice a si misma - quiso llamarle Giovanni. Pero en honor de mi patria, la bella tierra de Provenza, aun que se llame  Giovanni, para mi será siempre mi François.
 Y con el tiempo, todo el mundo comenzó a llamarle François, Francesco, Francisco.



Baja el telón…sube el telón…


Pasan los años. Y muchas cosas han pasado.

Visitará al  Conde de Segni, ahora Papa Inocencio III, quien reconoce la Orden. 

Visitará al Sultán de Egipto Malik al-Kamil, nieto del mítico Saladin. 








 Y un buen día el Santo Hermano Francisco decidirá representar en una especie de teatro de la época  por primera vez la SAGRADA REPRESENTACION  del Nacimiento de Nuestro Señor.  Y eso lo hará en una ciudad pequeña de Italia, en Greggio, no muy lejos   de Roma.   Escogerá unos campesinos de la zona y los pondrá a actuar  como actores.

Y ese será el primer pesebre.

El primer pesebre viviente de la historia, Made en Italy,  por voluntad de San Francisco de Asís, patrono de Italia, medio italiano y medio francés. 
 El hombre que hablaba con los animales.

                                                            
  
    Nota:     Esto, del pesebre viviente de San Francisco de Asís es un hecho verídico, históricamente comprobado. Pero  después intervino la leyenda…y la leyenda cuenta que en el Pesebre Viviente había los varios personajes, pero faltaba el Niño Jesús, obviamente…. y...a medianoche en punto, de repente… en la cuna de paja, apareció el Niño!!!  Otro milagro atribuido a Santo Francesco de Asís.


27 dic 2011

Triade de Navidad: 2/3 San Nicolaus de Mira.



Fresco medioeval en Sofia,
Bulgaria de Santo Nicolaus
 NICOLÁS 

ENTRE MITOS, LEYENDAS, HISTORIA,
SUPERSTICIONES,  niños  felices y
mucha comercialización.…..........




San Nicola di Bari
Érase una vez un pueblo en el sur de Italia que se llamaba Bari. Eran todos buenas gentes y orgullosos de haber por fin terminado la construcción de su magnífica iglesia dedicada a su santo patrono.  Pero faltaba algo que le daría el caché a toda iglesia que se respete, el último toque necesario: faltaba una reliquia del santo.Cómo conseguirla?  El santo  varón candidato  a patrono se había muerto ya desde hacia  casi 300 años. Sus santísimos huesos reposaban en su tierra de origen, Anatolia, Patara, Licia . Habían sido  infructuosas las gestiones ante el Emperador de Bizancio para obtener algo, aun que fuera un dedo, un meñique, un trozo del manto, cualquier cosa que hubiese pertenecido al santo  obispo  de Mira en su vida terrena.  Y últimamente, con la llegada de los Turcos infieles en esta zona cuna del cristianísimo, la posibilidad  de obtener la famosa reliquia estaba desvaneciendo siempre mas y mas.        
Sin embargo la fe mueve montañas, como diría dentro de algunos siglos  otro personaje, infielísimo y merecedor del infierno, pero que de montañas sí,  sabía. Y algo se movió; y lo que se movió del puerto de Bari, ciudad de mar, fue un barquito, un velero, con sus pocos pero valientes marineros, hombres temerosos de Dios pero no de las tormentas marinas ya que contaban con la bendición del Obispo. No del Obispo muerto en Anatolia, sino la del Obispo actual. Y entre saludos, besos y abrazos los marineros salieron para ir a tierra de infieles y tratar de convencerlos a darles, regalarle, venderle, una reliquia del santo patrono. Llegados a Anatolia, ya tierra de turco y que se llamara Turquía, los fervorosos marineros cristianos no lograron convencer o sobornar a las guardias turcos que custodiaban la región.
Pero, como se decía en Italia  hasta  pocos años antes,  AUDACES  ADIUVAT  IPSA  VENUS.  ¿Qué hicieron entonces los píos marineros que ya no eran  paganos para poder dirigirse a la diosa Venus? Se habían transformados en  buenos cristianos y  ansiaban, decían,  los placeres puros y castos del paraíso  cristiano. Pero eso no impidió que hicieran con  astucia y subterfugio lo que no pudieron hacer  con las buenas. Recordemos que “ el fin justifica los medios " fue otra aseveración  de origen italiana.  Así que, previa santiaguación y temerosos de los usos  que solían darles los turcos a sus  afiladas tijeras, nuestros píos marineros,  de noche,  a escondidas, a falta de vírgenes violaron el cementerio y se llevaron no un dedo o una reliquia mínima del santo, sino al santo entero: todo su cuerpo, o sea todos sus santísimos huesos; completos y sin pagar un centavo. Cumplida la misión de rescate, emprendieron la vía del regreso, con el santo botín a bordo del barco.
Pero, ¿qué  sucedió en las esferas celestes? Los marineros merecían una recompensa por recuperar los santos huesos de  Obispo Nicolaus de Mira, turco. Pero también tenían que recibir un castigo por el robo, infracción  gravísima  a los santísimos mandamientos. Por lo tanto el Dios que todo lo sabe y todo lo puede, mandó una tormentosa tormenta en todo el centro del Mediterráneo. Los marineros se ahogaron todos entre los oleajes,  pero del cielo bajo un ángel, experto timonel…
Así que, según sigue contándonos  el Liber Pontificalis,  los ciudadanos de Bari, todos reunidos en el puerto, vieron al velero acercarse con las velas hinchadas de viento favorable… pero al velero solo… y que llegó al puerto en perfecta maniobra marineresca,  sin marinero alguno a bordo.

Basilica San Nicola de Bari en Bari.

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Así fue que la ciudad de Bari por fin tuvo en su iglesia, promovida a Catedral, el cuerpo entero de su santo Patrono,  que de ahora en adelante no se llamará mas nunca Nicolaus de Mira, Anatolia-Turquia, sino San Nicola di Bari.  Y si no fuera que estaba ya muerto habría aprendido el italiano con el sureño acento de Bari.
 Pasa el tiempo. Y por Italia además del tiempo siguen pasando tropas de todo tipo y etnias y razas. En un momento determinado pasaron los cruzados.  Pero no eran Cruzados que iban a Tierra Santa, sino  cruzados que regresaban  de Tierra Santa para ir a sus tierras menos santas, en las selvas de Alemania. Se trataba de soldados cruzados alemanes, obviamente, que en las cervecerías patrias  contarán historias verdaderas o bien inventadas sobre  odaliscas procaces, musulmanes cornudos y santos cristianos.Y cuando esos casi turistas se encontraron con las tradiciones de Bari, se emocionaron tanto que, no pudiendo llevarse las reliquias de  San Nicola di Bari, se  llevaron por lo menos su historia, agregándole algo de fantasía. Es con cierto esfuerzo, pero también los germánicos a veces tienen algo de fantasías.   Además de sus  fantasías también llevaron errores de tipografía, errores de amanuenses, o sea errores de los santísimos monjes copistas  que  copiaron mal el nombre de San Nicola transformándolo en Santa Klaus. Así que en Alemania llegó Santa Klaus donde se les a agregaron  todas las parafernalias nórdicas, a comenzar del Tannerbaum, el abeto, en recuerdo del árbol de la vida Celta y los ocho renos. Y así conocemos ahora en casi todo el mundo al ex opispo turco en sus variadas versiones, ya transformado en personaje comercial.
                                                         ***
Por pura curiosidad, ¿quieren recordar los nombre de los Renos? Aquí van:
Rudolf  ( el primero, nariz roja para iluminar el camino)-Dasher ( el alegre)-Danzer ( el bailarín)-Pranzer ( acróbata)-Vixen ( juguieton)-Comet ( luz) – Cupid ( amor)- Donner ( trueno)- Blitzen ( relámpago)


      
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9 dic 2011

Triada de Navidad: 1/3 Dionisie de Mic

 Baja el telón… sube el telón…

 Anno 350 post Christum Natum ( A.D.)



 Papa Julio I pasea nerviosamente adelante y atrás, maños recogidas detrás de la
 espalda, en una sala del vaticano que todavía no es el Vaticano:

”…que nació  cinco  años antes de cuando nació…que ¿nació en diciembre? ¡No! ¡Porque en diciembre  por allá hace frío, hay nieve y san Luca  (evangelio) dice que los pastores pastaban pasto verde con las ovejitas, y había cielo estrellado, sin nubes !…ERGO…no podía ser de invierno… que el Censo   donde tenia que acudir esa pareja de recién casados no se haría en diciembre…nunca los romanos los hacían en diciembre, mes friísimo, nadie acudiría  y lo hacían cuando el frío amainaba.”

Papa Julio I llama con voz alta:


Papa Julio I
 

"Monje Dionisio, dicho el Exiguo: Te voy a encargar   un encargo que si lo   cumples a satisfacción, ya no serás el Exiguo sino el Grande.  Póngame orden en este marasmos de fechas y opiniones; que si nació antes que si después, que  si nació de invierno que si de primavera.  Hay que tener  prudentemente en cuenta que vendrán los Protestantes   que siempre protestarán, vendrán los Testigos de Jehová que dirán que somos paganos… Y un sin fin de hinchabolas que nos harán la vida imposible, en lugar de quedarse humildes como las ovejitas y seguir nuestras decisiones. Menos mal que, con el  tiempo, vendrá la Ley  de Infalibilidad del Papa, y AMEN. Pero tu, Monje Dionisio, dime la fecha, día y hora de cuando nació nuestro Señor Jesús Cristo! Estudia, escudriña, vea e inventa pero dame una fecha!”

Baja el telón… sube el telón…

 Algunos años después, más cansado, mas doblada la espalda, el Monje Dionisio el Exiguo se presenta en el vaticano que  todavía no es el Vaticano.

 “¿De donde vienes viejo? ¿Quieres ver al Papa?  Y que ¿te dio un encargo?” Le pregunta
El Monje Dionisio el Exiguo.
-Dionisie el Mic-
 una especie de portero, con aire de importancia.

“Llego de Dobruja, en la Escitia, tierra  que con el tiempo se llamará Rumania, y traigo tres cosas “ dijo el viejo Dionisio con paciencia”  la primera es como usar cierta  hierba para aliviar los dolores de reumas a los  huesos cansados de los viejos;  la yerba se llama cannabis indica  y sirve  para un baño de vapor como lo describió ya Heródoto  casi mil años atrás, una especie de sauna de marihuana”.        

        ...los escitas toman la simiente del cáñamo, se meten debajo de las mantas, y entonces tiran la   simiente sobre las piedras calentadas al rojo vivo, y la simiente exhala un perfume y produce tanto vapor que ningún brasero griego podría superar tal cantidad de humo: los escitas aúllan encantados y felices  en su baño de vapor.

La segunda novedad que traigo  después de varios años de estudios y de haber casi inventado el número CERO, es que  de ahora en adelante se dejará la costumbre de fechar los años como A.D.: idem est  Anno Diocleciano, como hacemos ahora, porque el A.D. hace referencia  a un emperador pagano persecutor de cristianos. Y de ahora en adelante se fecharan A.D., pero en otro contexto, o sea  Anno Domini,    calculando los eventos a partir del nacimiento de nuestro señor Jesús Cristo…. 
 
Pero allí  Dionisio se interrumpió porque no vio interés en el guardia  -futuro  guardia suizo- que cuidaba al Papa en aquél momento. Y pidió ser recibido por Jefe Máximo. El cual Jefe Máximo, Papa Julio I,  todavía no  era infalible  todavía porque habrá que esperar a  Pio IX con el Dogma de la Infalibilidad del  Concilio Vaticano I, en 1.870, A.D.   Pero Julio I,  sacerdote pero hombre y de sanas curiosidades, al comenzar a recibir las  noticias,  quiso de inmediato  hacer  una prueba del Sauna a la Marihuana. Y fue  tanto el contento y satisfacción del Papa, futuro santo, que feliz en el medio de los humos por fin se acordó y  le preguntó  a Dionisio:
“ Que era lo que te había pedido que tu hiciera para mí?... “

Entonces el paciente Dionisie  cel Mic (así se llamaba en Rumano) y siempre mas exiguo, le recordó  a Su Santidad  la importancia de fechar los años a partir del A.D. de Jesús Cristo y  no del A.D. de Diocleciano. El Papa no entendió muy bien  la diferencia pero dijo: IMPRIMATUR. Y se imprimió…

 “Santo Padre, “continuó el Exiguo “la cuestión mas importante que Su Santidad  me encomendó era poner orden en las  catervas de interpretaciones  sobre la fecha de nacimiento de Nuestro Señor Jesús Cri…..”
“Claro  claro, que te creías, monje  Exiguo “lo interrumpió  el Papa “tú de verdad ¿pensaste  que por estar en medio de los humos de la Sauna de Marijuana el Papa se olvidara de algo?    no sabes lo que yo recé al Dios que todo lo puede ¿para que  iluminara tu pequeño  celebro y me consiguieras una solución  justa, correcta, verdadera y prudente? Dime, pues, ¿a que conclusión llegaste?”
El Monjito le contestó:“Ves, Santo Padre, por largos años yo he estudiado costumbres  de pueblos los   mas diferentes de  nosotros, algunos de los cuales en tierras que  no es  dado conocer todavía...  y que se llamarán américas …“
“¿Para qué carajo “  lo interrumpió el Santo Padre  “debo preocuparme por pueblos que no es dado conocer todavía?  ¿No crees tú, exiguo, que la cantidad de problemas  que tengo con  los pueblos conocidos ahora  sean ya suficientemente grandes? Dale. No me hagas perder mi tiempo precioso… llega a la conclusión….”
“Así “  continua paciente Dionisio “ lo que he descubierto es que no solamente entre los romanos,  los persas, los fenicios y los sirios hay celebraciones  que se refieren al nacimiento de un Salvador  nacido  de una  virgen, o de una mujer mas o menos virgen, entre el 20 y el 25 de diciembre. ¡No!  Los hay también en otros pueblos. Y me refiero a pueblos de los cuales más o menos hemos ido hablar: como los hindús, los egipcios, los Germanos, los  Escandinavos con sus druidas.”
“Cuidado, Monje Dionisio“  le miró el papa con algo de severidad en los ojos “cuidado con lo que dices, no seas que pase tu a la historia no como el Exiguo sino como el Herético…y termines tus días  en un asado a la Rumana. Pero hazme unos ejemplos de esos casos de imitación  irrespetuosa de  nuestras  Santas Tradiciones.”

“Padre Santísimo y Reverendísimo, algunas de esas tradiciones son anteriores al día feliz del Nacimiento de nuestro Señor Jesús Cristo“  dijo con humildad el Exiguo. “Por ejemplo, en la mismísima Roma…la santísima Roma, ahora purificada por el  Cristianismo, existía desde tiempos anteriores la felonica creencia en el dios Mitra, como encarnación del Sol.  Lo veneraban persas e hindús. Y  sus sacerdotes,  con atuendos  blancos, celebraban el 25 de diciembre como día de su  nacimiento de una  Madre  Virgen en una pobre cueva.  Se decía que el Magnánimo Emperador Constantino el Grande,  el del   IN HOC SIGNO VINCES  y del  EDICTO DE  TOLERANCIA del 313, se decía, decía yo, que era  adorador de ese dios. Y también los romanos, aun sin  las novedades orientales de Mitra, festejaban el 25 de diciembre como día del Sol Invicto: o sea Natalis Soli Invicti : que era Apolo en su coche de fuego surcando con sus  caballos los cielos de oriente a occidente, y también se le decía Febo, la versión Griega, con su coche ensamblado en Atenas. Los Romanos, a los cuales no se les escapaba ocasión para festejar, beber vino de los Castillos Romanos,  cantar canciones licenciosas y comer Lechoncitas asadas…a los Romanos, decía,  no se les escapaban en ese mismo periodo las Saturnalia, fiestas en honor de su falso dios Saturno. Y en esa semana de festejaos  se posponían los negocios, las guerras,  había intercambio de regalos y se liberaban temporalmente a  los esclavos. “
Dionisio el exiguo notaba  que Julio I mostraba cierto interés para oír  de  esas costumbres exóticas de pueblos antiguos  y prosiguió:
“Y también los Germánicos, los Escandinavos, y otros  pueblos barbarísimos al otro lado del canal de la Mancha, donde la ultima Thule de Platón, festejan al 25 de diciembre el nacimiento de Frey dios nórdico del Sol Naciente, de la Lluvia y de la Fertilidad. Y en esas fiestas suelen adornar a un árbol perenne, que llaman  en sus lenguas incomprensibles Yggdrasil, o Arbol del Universo o Arbol de la Vida, donde colocan regalos para el dios”

Papa Julio I estaba reclinado en su butaca.  Después de la sauna se le  veía relajado  y pensaba. ¿Que escaria pensando el sucesor de Pedro?
De repente posó su  mirada en el  monje.
“ Y tu que piensas de esa coincidencias de festejos paganos  con los nuestros? ¿Que haremos?  Siéntate acá conmigo, Dionisio. Y  hablemos con flaqueza…”
 El Buen Dionisio se sentó en un taburete al lado del Papa.
         “Santo Padre… no es una coincidencia… En realidad nada tiene a que ver con nuestra Religión, la verdadera, ni con las de otros; esas son  las falsas religiones y engendros del demonio.”
          “Te dije que me hablara con franqueza, monje y no como si hablaras al rebaño desde  un pulpito a mitad de Misa. Explícate, pues!”
           “Santo padre, el 25 de diciembre o unos o dos días antes, en toda la tierra que estamos por arriba de la  enfocada África, la noche es la mas larga de todas las demás  noches, y el día es el día más corto. ¿Que significa eso? Que a partir del 26 de diciembre las noches se harán siempre mas cortas, los días mas largos, el sol se levantará siempre antes, cada día un poco antes del anterior y se acostará un poco mas tarde cada día...O sea… comienza a despertarse el mundo. Salimos del frío y de la hambruna del invierno, se acercará la primavera y recomienza el ciclo de la vida,  la fertilidad, las flores, las frutas, el periodo de sol, del amor, de la alegría y  de luz. Por eso todos los pueblos     que he visitado y de los  cuales he oído hablar, festejan el inicio del nuevo periodo de vida. Y en esa  misma fecha se festeja el resurgir. Y nacen los dioses. Claro, Santidad, son tradiciones, paganas y falsas.   Pero están arraigadas en los pueblos.Por eso le digo, Santidad, es inútil que estudiemos la fecha exacta del nacimiento de nuestro Señor Jesús Cristo: primero  porque nunca lo sabremos; hay quien dice una cosa y quien dice otra y todas son verosímiles  o imposible de  creerse. Y, segundo, no es necesario. Hagamos que la fecha del Nacimiento coincida con las fiestas ya aceptadas por los pueblos, máxime para los romanos, ya que para  las gentes lo importarte son las fiestas; sea lo que sea  lo que festejan no importa tanto: lo que importa es festejar algo; casi casi, le diría yo a Su Santidad, que a los pueblos lo que importa es festejar el terminar de las penurias del invierno. Y con el tiempo se olvidaran que el 25 era la fiesta del Sol Invicto o de Mitra, o de Osiris. Para ellos, en pocos años, el 25 de diciembre será la fecha del Nacimiento del Redentor.  Y seguirán tomando vinos de Castelli y comiendo lechoncita.
 Y así sea. “

 “Sea así, “dijo  Papa Julio I “y amen. “

Y agregó: “IMPRIMATUR “. Y se imprimió la ley.

Y el 25 de diciembre fue bautizada como fiesta del Nacimiento del Hijo de Dios, en Belem.
A partir del año 350  A.D.
(Anno Domini  y ya no  Anno Diocleciani)