20 oct 2012

Post Nº 6/7. STALIN.-VALENTINA ISTOMINA Y ROSA KAGANOVICH


Post Nº 6/7   Valentina Istomina.
          Rosa Kagánovich.

Con la muerte de Nadya Alliluyeva quizás algo cambió en las relaciones “amorosas” de Stalin. Desde entonces en la mayoría de los casos  tuvo encuentros  ocasionales.  Buscaba o le proporcionaban  aventuritas  fugaces con bailarinas, chicas de teatro,  casi siempre muy jóvenes y  de ambiente de dudosa respetabilidad.   Stalin, como Mussolini,  contemporáneos, lo que buscaban  en general era la  propia satisfacción sexual, como necesidad fisiológica.   Nada  más.  Esos dos tenían algo en común. Eran muy bruscos y provenían ambos de un ambiente poco refinado.  Ambos tuvieron que aprender a comer decentemente en una mesa y a  tratar a las damas, aun que no lograron mucho en este sentido.   Casanova,  el amante por antonomasia,  lo que  buscaba en sus relaciones amorosas era proporcionarles placer a sus amantes, más que a sí mismo.  Por eso todas, absolutamente todas, se recordarán de él con cariño, aun después de años. Lenin no era así.  No era ni el uno ni el otro. Era otro tipo. Trató siempre de ahogar su romanticismo innato burgués con impuestas actitudes ascéticas  con miras a las estrictas normas de la Causa.   Pero aquella vez, en el seductor ambiente fabuloso de Paris, del Café de Lyon, se enamoró de verdad.   Amó muchísimo y también sufrieron  muchísimo, él  y ella, la bellísima Inessa Armand, su amor prohibido;  y también  otra Nadya, por casualidad, la fiel esposa.  
Bueno. Estabamos hablando de Stalin Pido disculpa por las digresiones.Prometo que al terminar de escribir, no las tendré más.
Entonces, decía,  que después de la muerte de su  segunda esposa, en 1931, Stalin tuvo casi exclusivamente aventuritas de carácter fisiológico, para definirlas de algún modo.
 Casi exclusivamente.  
Porque de 1931 al año 1953, cuando  Stalin murió, cuando se apagó  (o le apagaron su vida), el trecho es largo.  Y en este periodo, especialmente  al final, entre los  cabellos azabache tipo gitano  comienzan a aparecen también  bastantes  hilitos blancos.  Y a partir de 1934, más o menos, lo vemos relativamente tranquilo.  Tendrá  un ama de casa que lo cuidará: Valentina Istomina.  No conseguí absolutamente ninguna foto de ella. Una persona competente seria, devota, fiel, que  no hablaba  mucho, que hará de mamá a   Svetlana, la hija de Stalin que había quedado   huérfana a los cuatro años. Se portó bien esa buena mujer que aparentemente  tenía algo de atractivo.  Le dio cariño a la Svetlana y a su papá. A veces le calentaba su cama, cundo él se lo pedía  y ella, devota y fiel,  le obedecía. Y esta unión en realidad duró la belleza de 15 años, así que bien podría considerarse  a la Valentina como esposa de facto de Stalin.                         
                                                          **
Y en el ultimísimo periodo de Stalin,  aun que algo difuminada, apareció también  otra mujer: una Rosa Kagánovich, hermana  de un altísimo funcionario del régimen,  Lazar  Kagánovich,  de segundo apellido Cohen, lo cual no dejaba duda sobre sus orígenes. Y tenía una hermana, ese Kagánovich, la Rosa Kagánovich, de la cual conseguí solamente una foto de cuando tenía apenas  13 años. Y es una foto muy controvertida.


ROSA KAGÁNOVICH COHEN ?   
STALIN.-.1952.  a sus 74 años.. Morirá al año siguiente

 Pero que algunos juran que fue la última de las amantes de Stalin, la del último año de su vida.  Y de la cual no se sabe absolutamente nada.
Y ahora aquí creo que no resistiré  a  la tentación de comentar,  como curiosidad  de carácter histórico-mítico,  algo relativo a Georgia , a la Nomenklatura Soviética y a los judios rusos, creyentes o ateos, sobre su  influencia  en la  formacion de la Union Sovietica.  Si despues de leído,   el argumento les parece tedioso,   me permito sugerirles a mis lectores que no lo lean.
Todo el  mundo sabe que con el Emperador Tito y la destrucción del Templo de Jerusalén muchos hebreos fueron esparcidos por el mundo: y  nació la historia o leyenda de las diez  ( o  doce ) tribus perdidas de  Israel  que fueron a parar  no se sabe  dónde. Pero una de ellas, la tribu de Simeón, la tribu numero 10 ( o la doceava  según otros) ,  aparentemente llegó bastante arriba en el mundo, para asentarse más o menos en la zona entre Mar Negro y Mar Caspio, donde  anteriormente estaba la Cólquida mítica del Vello de Oro, como hemos asomado antes en este blog:  la Georgia actual.  Pero antes de ser la Georgia actual,  pero después de la Cólquida mítica,   esta zona geográfica perteneció también  y  nada menos que al reino de los Càzaros.   Y en este reino de los Cazaros parece que confluyeron una cantidad enorme de hebreos provenientes de Persia, de Babilonia, de Palestina, de Iraq.  Ahora no logro recordar bien donde es que leí que ese Reino de los Cazaros  fue también considerado el primer Estado de Israel después de la diáspora. 


TORAH

Pasa el tiempo, llegan los Eslavos. Desapareció el reino de los cazaros y  con la constante manía del hombre del  “quítate tú que me pongo yo”, muchísimos hebreos  agarraron sus pertenecías y su Torah  y se  desplazaron  "por allí "  y desde entonces fueron llamados los asquenazis: hebreos rusos y de centro Europa, en contraposición a los hebreos sefarditas, de Sefardí, el antiguo nombre árabe de España. 
…y terminó el comentario histórico-mítico.



Esos Asquenazis  serán un porcentaje muy elevado en la alta directiva de de la nueva sociedad soviética, la Nomenklatura. El elemento judío  estuvo muy presente, a pesar de los pogromos.  Sea en el ambiente masculino como en el femenino; se notó más   en el femenino, por contraste con la mujer no judía: la mujer hebrea era más preparada, mas despierta, más culta,  más moderna en ciertos sentidos. Hay motivos. Hablaremos de esos en otros momentos.  Y son los mismos judios, los padres fundadores de la Union Sovietica, que Stalin, con sus  laxantes purgativos, eliminó poco a poco. Menos Kaganovich, que llegó a ser el único de los viejos directivos, de la Nomenklatura, que sobrevivió a Stalin. Pero, seamos claro. Stalin no los eliminó por ser judios. Los eliminó para quedarse él, solo, el Zar Rojo. 

                                             FIN del Post Nº 6/7

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me tienes deslumbrado-de verdad-con tus conocimientos históricos, especialmente con los más inasibles.
¡Chapeau!
Angel