28 sept 2012

Post Nº 4/8...-W.Churchill. La Esposa de Churchill


Post Nº 4/8… W.Churchill.-  CLEMENTINE HOZIER.
                                            La esposa de Winston Churchill




Los Novios Winston y Clementine
Considerado el ambientito “victoriano” de algunos retoños de la alta sociedad inglesa de la época, se podría decir que la esposa de Winston Churchill, Clementine Hozier, haya sido una persona tranquila y normal.  Indiscutiblemente era muy bella, lo cual, en honor a la verdad, no era un atributo muy normal entre las inglesas de pura raza. Ahora quizás la situación ha cambiado por los frecuentes adulterios que han mejorado el aspecto físico de las inglesas.  Era además muy brillante, la Clementine.  No tenía un centavo, lo cual hace honor a sir Winston Churchill.  Pero por sus ascendencia, si es que era de ella, aparentemente se remontaba a épocas antiguas de la historia de Inglaterra. 
 
Clementine Hozier
 Nació en 1885.  Su mamá fue Lady Blanche Henrietta Ogilvy, segunda esposa de Sir Henry Hozier. Tendremos tiempo en un próximo post de hablar de las "frivolidades" de Lady Blanche. Y de la supuesta esterilidad del presunto padre. Por ahora esto no nos interesa. Solamente asomaremos que Lady Blanche, con su consueta nonchalance,  dijo  una vez que el padre verdadero de Clementine era el apuesto Capitán William George Midleton, formidable jinete.   Sea como sea nuestro Winston Churchill, curado en salud por el “No, thank you…” de la Ethel Barrymore diez años antes, no se apuró mucho en buscar pareja.  Conocerá  socialmente a la Clementina en sus 23 años. Winston tenía 34 y ya era algo conocido como político.  ¿Queremos curiosear algo en la vida de la jovencísima Clementina? A sus 15 años había ido, con la mamá, por supuesto, a pasar unos días al sol, en tierra de Francia. Entre los ingleses que frecuentaban (¡nunca  frecuentar los del continente!), parece que la jovencísima Clementina quedó enamoradísima, muy platónicamente, de un tal Siker, “el hombre más apuesto y atractivo que había visto en su vida". Terminada la vacación en  tierra de Francia se terminó el amor de quinceañera.
 Y a los 18 años se comprometió, en gran secreto, con cierto Sidney Peel, sin consecuencias de ningún tipo.  A los 18 conoció a Winston Churchill. Posiblemente nuestro Winston nunca fue muy apuesto ni atractivo.  How do you do… y nada más. Se volvieron a ver después de cinco años. Y, misterios del amor, quedaron impresionados el uno de la otra.  Petición de mano y Lady Blanche autorizó el matrimonio.  Se casaron. Tuvieron cinco hijos. Conseguí la foto solamente de Sarah, la que fue actriz de cierto renombre.  

Sarah, hija de Churchill, actriz
Durante la Primera y la Segunda Guerras mundiales, ella, Lady Clermentine, participó activamente en actividades de asistencia social.  En el periodo entre guerras, aceptó la invitación de dar un lindo crucero en zonas  de Australia.   Su marido no pudo ir o no quiso. Fue sola y… ay, ay, ay, tuvo un romance con alguien. ¿La culpa? Del ambiente romántico tropical, claro.
De regreso de su viaje  para su casa en Inglaterra trajo una paloma Bali. ¿Regalo para su marido? Desconozco por completo el significado.
Baronesa Clementine Churchill, ya viuda
 En otra ocasión, poco antes de que estallara el segundo conflicto mundial,  ella se encontraba otra vez con  el mismo barco. Pero  una noche escuchó la BBC acusar  violentamente a su marido de querer a toda costa entrar en la guerra contra los  alemanes.  Como ninguno de los presentes defendió la posición de Churchill, ella se ofendió o debió considerarse ofendida, dejó barco y crucero y regresó donde su Winston  en Londres.

 Tuvo con su marido 56 años de matrimonio. 



Con Hijo y Nieto, de etiqueta

 Churchill murió a los noventa,  a pesar de haber fumado puros como loco y bebido coñac y champagne toda su vida y tener siempre bastante  sobrepeso.  Y,  cosa que supe solamente hace poco, cuando se dio cuenta de que le estaban fallando las capacidades cerebrales, le entró la bestia negra, la depresión tremenda que afecta a los grandes cuando se dan cuenta de que ya no son tan grandes y se asemejan siempre mas a los hombres normales.

                                       Fin del Post Nº 4 8…



6 comentarios:

Alfa Segovia dijo...

Otra belleza Lady Clementine. Indudablemente Churchill tenía buen gusto.

Unknown dijo...

No debe haber sido fácil vivir con una y con otro. Grandes ambos, geniales ambos... difíciles ambos!
Fidelidad... no sé. Pero lealtad, absoluta!
Besos

Anónimo dijo...

Mirando la foto de Sarah Churchill encuentro en el arco de sus cejas un parecido con la extraordinaria Joan Crawford. Anoche, en el servicio de cable, pasaron la película Grey Gardens con Drew Barrymore actriz de la famosa dinastía Barrymore.
En el tema de los fumadores, hay otro político abanderado de la industria tabacalera: el comunista español Santiago Carrillo quien ha muerto con 96 años. Deberíamos empezar a fumar y/o hacernos del partido comunista.
Angel.

Aldo Macor dijo...

Crrambra, Angel!!!
Esa era!!!!!!
Sabia yo que esa hija de Churchill era una cara conocida....Quando la habré conocida? Cuando la vi?
Como fue que no me acuerdo?!?!?
Y dale y dale a rebuscar en la memoria.Y nada.
Y tu me reolviste el misterio!!??
Mucho mas sencillo y menos heroico de lo que me imaginaba. SE PARECE MUCHISIMO A LA JOAN CRAUFORD, LA ACTRIZ FAMOSISIMA Y DESPUES PROPIETARIA DEL LA PEPSI COLA... JAJAJAJA

Aldo Macor dijo...

ANGELITO BELLO: Grazie, Joan Crawford!

Anónimo dijo...

Joan Crawford era buenísima haciendo de mala.
Angel el feo.