JOHN
WICKLIFFE
1320-1384
Después de los tiempos del
Conde Santo Tomas de Aquino, italiano, será un ingles la primera
persona que se nos aparece
atreviéndose a criticar, con o sin razón, la autoridad casi indiscutida hasta el
momento de la Iglesia Católica Apostólica Romana y de su máximo representante:
el Papa de Roma. Será la chispa que dará comienzo en
el norte de Europa a una reforma en los sentimientos religiosos que manifestará,
gosso modo, un cierto deseo de independencia de la teocracia
y autocracia de Roma, bien sustentado, éste deseo de independencia, con un
sólido contorno de motivos económicos mas concretos. Los
buenos germánicos, siempre más ahorrativos que
los mediterráneos "despilfarradores", comenzaron a cansarse de
que se gastara en obras de arte "inútiles" lo que ellos pagaban
como Óbolo de San Pedro. Por envidia o lo que sea,
no querían seguir siendo financiadores del esplendor del
Renacimiento italiano y del lujo y la lujuria de la corte papal.
Y apareció un inglés, sin duda non único pero el mas importante. Este ingles será John Wickliffe, teólogo y reformador, fundador del movimientos de los Lolardos y considerado por muchas personas como el padre o abuelo de los Protestantes. Y quizás fue el primero en traducir del latín al ingles, idioma “vulgar” de su tierra, la Bendita Biblia, completa y cuando todavía no había imprenta.
Y apareció un inglés, sin duda non único pero el mas importante. Este ingles será John Wickliffe, teólogo y reformador, fundador del movimientos de los Lolardos y considerado por muchas personas como el padre o abuelo de los Protestantes. Y quizás fue el primero en traducir del latín al ingles, idioma “vulgar” de su tierra, la Bendita Biblia, completa y cuando todavía no había imprenta.
¿Sus consideraciones?
1) La devoción del sacerdote es absolutamente necesaria para que pueda suministrar
válidamente los
sacramentos. No podía estar
en pecado, de otra manera los sacramentos no valían. Afirmaba
eso, enfáticamente, mientras que Roma pensaba todo lo contrario.
Era obvio: con la corrupción que había en Roma, ¿donde
conseguir un clérigo que no estuviera manchado de pecados?
2) Propugnaba una especie de predestinación: si Dios, en su
sabiduría infinita del presente, del pasado y del futuro, sabía de antemano
quien sería salvado y quien se iría al
infierno, donde encontrar el Libre Albedrío ? Porque el saber
implicaba la voluntad divina, ya que nada sucedía sin
la omnipotencia de Dios. Bizantinismos de moda de
la época.
3) Los cristianos debían
de regresar a la pobreza apostólica y
la Iglesia debía de pagar impuestos para sus muchas propiedades. Aplaudieron
todos los envidiosos de las riquezas de la Iglesia. El actual Papa Francesco
parece ser destinado a seguir el mismo camino con Jesús de
Nazareth, con San Francisco, y con este Ingles.
4) Negaba la transubstanciación : o sea que no era cierto que el
verdadero cuerpo y sangre de Jesús Cristo estuvieron realmente presentes en la
Ostia sagrada de la Comunión, sino que era un mera simbología. Sin duda
una discusión de ese género parece ridícula y
ociosa hoy en día con tantos otros problemas, ahora mas visibles para la
humanidad. Pero en aquellos tiempos la religiosidad permeaba
completamente el quehacer cotidiano.
5) La gente normal, decía además Wickliffe ,
debía de poder leer la Biblia y por lo tanto había que traducirla al ingles:
cosa que él hizo, contra la
voluntad de Roma, que pretendía mantener
el monopolio de la interpretación de las Escrituras. Si los varios
chamanes no mantienes lo mágico, lo oculto y lo misterioso de las
religiones, que queda de ellas? Las grandes masas son atraídas por
lo oculto y misterioso: los valores éticos que puedan haber -- y
que muchas veces los hay -- no les interesan porqué implican
sacrificios. Y sacrificios es casi siempre se pide
al pobre hombre común. El cual, simple y explotado, solo
piensa en su panza y al sexo: los dos
instintos básicos, como todos los demás animales.
Hablamos un poco de ese inglés. No era un don nadie sino
un profesor muy estimado de la Universidad de Oxford. Con el tiempo y con sus
ideas se hizo muchos
enemigos en la Corte Inglesa, entre el alto Clero y naturalmente en la Iglesia de Roma: el Papa lo excomulgó.
Wickliffe mandó sus
discípulos a predicar sus tesis religiosas igualitarias, lo cual muy
probablemente ha sido uno de los factores que han producido indirectamente la Crisis de
la Sublevación de Campesinos en Inglaterra de 1381. Fue condenado por hereje y expulsado
de la Universidad de Oxford. Más
tarde, ya muerto, el Concilio de Constancia lo declaró culpable de herejía en 1414 y se ordenó la quema de sus libros. Se
exhumó su cuerpo, se quemaron también sus
huesos ya podridos y las cenizas tiradas a un río. ¿Crueldad muy primitiva? En éstos últimos dos siglos hubo también en
la culta y aristocrática Europa mucha quemas de libros, de sus
autores y de sus lectores.
Pero tras su muerte, las
enseñanzas se expandieron con más rapidez que sus cenizas en el río. Su Biblia, traducida al Ingles y
accesible al público desconocedor del latín, se repartió profusamente por
medio de sus discípulos y Martín Lutero reconoció muy
francamente la influencia que Wickliffe ejerció en sus ideas. Algunos de los
conceptos enunciados eran demasiado audaces para su época: afirmaba que existía
una relación directa entre los hombres y Dios, sin la intromisión de la
Iglesia, sin la intervención del Papa o de sus prelados. Condenó la
esclavitud y la guerra, sostuvo que
la propiedad privada y la
servidumbre eran imperfectas
y pecaminosas y se debía tratar de suprimirlas.
Con teorías de ese tipo, era lógico que los poderosos de la
tierra, laicos o clérigos, condenaran al soñador
profesor de Oxford.
Hoy en día, un nuevo Papa en Roma, hijo de dos madres, Italia y Argentina, parece que está forzando algo de reformas en Vaticano. ¿Será en completa buena fe? ¿O será con una pizca de cálculo de conveniencia? ¿Conceder algo para no perder todo? ¿Modificar para que todo siga igual?
Hoy en día, un nuevo Papa en Roma, hijo de dos madres, Italia y Argentina, parece que está forzando algo de reformas en Vaticano. ¿Será en completa buena fe? ¿O será con una pizca de cálculo de conveniencia? ¿Conceder algo para no perder todo? ¿Modificar para que todo siga igual?
6 comentarios:
Mira por donde John Wilckliffe tendría algo que ver con la severidad de la Sra. Merkel hacia los hogazanes europeos despilfarradores.
Saludos, maestro.
Angel
También los ingleses son de raza germánica, anglo, sajones y normandos.. Es cierto que también estuvieron los latinos de Roma... pero,seguro que en esas zonas perdidas entre las nieblas, los que iban allá , cssi a la última Tule, eran Romanos,ciertamente, pero la gran mayoria eran germanicos naturalizados latinos. jajaj
Ah, me encanta el señor Wilckliffe! Un visionario, sin duda! Besos para ti, Aldo.
Realmente muy inteligente el Sr Wickiliqui, para su época, un visionario.Todos sus temas merecerían un análisis detallado. Nuestro querido Francisco, quizás pueda intentar algunas cosillas, pero es solo un hombre, tampoco podrá con esa estructura ( a la que no le pongo adjetivos ) que es la Iglesia Católica.
Carmen. querida Carmen. que placer oír de ti...Como sigues? Cuéntame algo. si?
Así que te gusta el Wuikiwuiki, como lo llamas tu, Laura?? Tienes razón. Es un hombre muy adelantado a su tiempo. Que triste destino, ves? Si alguien es muy retrasado, nadie le para, nunca, en la vida. Si uno es muy inteligente y casi puede predecir el futuro,lo matan. Y si es cierto que fue un dios a crearnos, tiene que haber sido uno de tercera, medio chiflado, para crear una humanidad tan contradictoria. Ciao, bella.
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